Si Ucrania utiliza misiles de crucero estadounidenses Tomahawk para atacar al interior de Rusia, EE.UU. estará en guerra con Rusia "en cuestión de horas", declaró  el exasesor del secretario de Defensa de EE.UU., Douglas Macgregor, en su cuenta de X.

Con esta advertencia comentó su intervención en un reciente pódcast donde analizó el posible suministro de estos misiles de crucero estadounidenses al régimen de Kiev y opinó que el presidente estadounidense, Donald Trump, no dará el permiso para utilizarlos para atacar en lo profundo del país euroasiático.

"Por muy equivocado y mal informado que pudiera estar Donald Trump, él entiende que si un misil Tomahawk cae en las afueras de Moscú, Riazán o Kazán, o de cualquiera de esos lugares, él estará en guerra con Rusia", dijo.

"Y esa guerra podría escalar rápidamente hasta el nivel nuclear. Y una vez que llegas al nivel nuclear, casi no tienes control , —lo sabemos por experiencia en múltiples juegos de guerra— y todos pierden", sostuvo.

"Creo que Donald Trump probablemente lo entienda", señaló, al agregar que "quizá no entienda el impacto de sus palabras" o las palabras de algunos miembros de su Administración. "Tenemos que volver atrás y examinar eso muy cuidadosamente", insistió.

Postura de Moscú

La semana pasada, el presidente ruso, Vladímir Putin, durante su intervención en el XXII Foro Internacional de Discusiones Valdái,  dijo que el posible  envío de Tomahawk desde EE.UU. a Ucrania significaría una nueva etapa en la escalada del conflicto, así como en las relaciones entre Washington y Moscú.

Según explicó, el uso de estos misiles de crucero es imposible sin la participación directa de militares de EE.UU., por lo que este paso involucraría a Washington directamente en el conflicto en torno a Ucrania. Además, reiteró que "esto no cambiará, en absoluto, la correlación de fuerzas en el campo de batalla ".

Si bien el mandatario dijo que estos misiles sí podrían ocasionar un daño, este se vería anulado por las mejoras en los sistemas de defensa aérea de Rusia.

  • A finales de septiembre, The Wall Street Journal informó que el líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, había solicitado a Trump el suministro de misiles Tomahawk. 
  • Además, el vicepresidente estadounidense, J.D. Vance,  admitió  que Washington está discutiendo la venta de Tomahawk a países europeos para su posterior transferencia a Ucrania, señalando que la "determinación final" sobre esta cuestión sigue en manos de Trump.
  • Paralelamente, el representante especial del presidente estadounidense para Ucrania, Keith Kellogg,  declaró  que el mandatario no se opone a los ataques de largo alcance contra Rusia, aunque todavía no ha tomado una decisión sobre el suministro de misiles Tomahawk.
  • A principios de octubre, WSJ  reportó que EE.UU. considera entregar a Ucrania misiles Tomahawk y misiles Barracuda.