Dos años después del ataque del 7 de octubre, Hamás sigue presente como actor armado en Gaza, pero ha sido severamente debilitado por la ofensiva militar israelí. Aunque ha perdido gran parte de su capacidad operativa y de liderazgo, no ha sido completamente desmantelado.
Reducción de fuerzas y liderazgo
Hamás ha sufrido la eliminación de miles de combatientes y la mayoría de sus altos mandos. Su consejo militar original prácticamente ha desaparecido, y sólo queda un comandante de alto nivel de la estructura previa al conflicto. Esta pérdida ha impactado su capacidad para planear y ejecutar operaciones complejas.
Reclutamiento acelerado
Para compensar las bajas, el grupo ha reclutado a miles de nuevos integrantes, muchos de ellos jóvenes sin entrenamiento militar formal. Este reclutami