El primer ministro francés en funciones, Sébastien Lecornu , ha abierto este martes una ronda de contactos para encontrar una fórmula de estabilidad política después de que el presidente, Emmanuel Macron , impidiera su renuncia inmediata pocas horas después de anunciar su Ejecutivo. El anuncio provocó airadas críticas por parte de la oposición y miembros de coalición, que tildaron su composición de continuista, un elemento que ya precipitó la caída de su predecesor, François Bayrou .
A Lecornu se le han encomendado dos prioridades a la hora de encabezar un nuevo Gobierno: la adopción de un presupuesto para 2026 y el futuro de Nueva Caledonia , región autónoma del Pacífico cuya unidad con Francia está en duda.
Para alcanzar el ambicioso objetivo macronista, que lidera una incóm