Apenas un día después del derrumbe del edificio de Hileras, 4, en el centro de Madrid, continúan las diligencias para tratar de esclarecer qué originó el colapso del forjado del bloque. El director general de Anka Demoliciones, -una de las empresas que trabajaba en la rehabilitación de la construcción-, Daniel Anka, defiende que se trató de "un accidente" y que "si hubiese habido una negligencia, podría haber sido peor" porque había unas 40 personas trabajando en el edificio. Así, sostiene que en la zona en la que se produjo el colapso "no se estaba trabajando".
El suceso deja cuatro víctimas mortales cuyos cuerpos han sido rescatados por los bomberos esta madrugada. De ellas, Anka asegura que "había tres en el servicio y la cuarta estaba trabajando en la cubierta, por encima del nivel de