Aunque no estuviera, Lamine Yamal fue protagonista en la derrota del FC Barcelona en Sevilla (4-1). Muchos se preguntan si, con su presencia, el equipo hubiera hecho algo más. Se echó de menos su desborde, su velocidad y su chispa. No obstante, algunas voces en el vestuario aseguran que hubiera sido lo mismo. Algunos compañeros aseguran que el joven ya no transmite la misma humildad que lo convirtió en el gran descubrimiento del Barça.
El ambiente tras la derrota contra el Sevilla fue tenso. Pau Cubarsí , uno de los más autocríticos, señaló que la presión “debe empezar desde arriba”. Nadie mencionó nombres, pero dentro se entendió que era un mensaje hacia los atacantes, incluido Lamine , aunque no hubiera jugado. En el grupo hay quien piensa que el equipo presiona menos cuando