El Nobel de Química premió este miércoles al británico Richard Robson, el japonés Susumu Kitagawa y el jordano Omar M. Yaghi por el desarrollo de un nuevo tipo de arquitectura molecular, las estructuras metalorgánicas.
Estas construcciones, conocidas como MOF por sus siglas en inglés, tienen múltiples aplicaciones prácticas y se usan ya para recoger agua del aire del desierto, capturar dióxido de carbono (CO2), almacenar gases tóxicos, separar las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) del agua o catalizar reacciones químicas.
“Las estructuras metalorgánicas tienen un potencial enorme, proporcionando oportunidades no previstas con anterioridad para materiales a medida con nuevas funciones”, señaló la Real Academia de las Ciencias sueca.
Los MOF poseen gran porosida