
Carlos Mazón se sinceró en la entrevista a OKDIARIO y quiso revelar los momentos más difíciles que ha vivido tras la tragedia que vivió su región tras la DANA de hace casi un año. El president desveló que el momento más duro fue cuando recibió en su despacho a una madre que perdió a dos de sus hijos . Además, Mazón revela cómo ha sido su relación con la alcaldesa de Valencia , María José Catalá .
PREGUNTA.- ¿Cuál ha sido el momento más duro?
RESPUESTA.- Cuando te sientas en ese sofá con una madre que ha perdido a dos hijos… Son momentos muy duros, muy duros. Pero eso nos compromete más con la recuperación.
P.- Una madre perdió a dos hijos…
R.- Uno cogido en su brazo y otro de la mano, tenía tres y perdió a dos.
P.- ¿De qué edades?
R.- Muy pequeñitos. Yo jamás me he hecho una foto con una víctima, jamás he aprovechado un encuentro con una víctima ni dado parte a los medios de comunicación, salvo que ellas hayan querido. Prefiero no dar datos. Saben que tienen la puerta abierta.
P.- ¿Cuántas víctimas han pasado por este despacho?
R.- Muchas, por la vía asociativa o personal, muchas.
P.- Volvamos a las cuestiones internas, ¿usted ha tenido la sensación de que la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, le ha querido hacer la cama?
R.- No, yo comprendo que en los análisis políticos se buscan siempre tres pies al gato, pero ella ha cumplido con su obligación como alcaldesa de Valencia, y yo he intentado cumplir con mi obligación como presidente de la Generalitat.
P.- Me pregunto por qué tardó varios meses en coincidir en un acto público con usted…
R.- Pues no me parece que fuera así… Tiraré de memoria, pero no es una cuestión a la que yo le haya prestado demasiada atención. En el funeral de las víctimas estuvimos juntos.
P.- Obviamente, sólo faltaba que ella no fuera al funeral. Digo en actos institucionales…
R.- ¿Sabe qué pasa? Que en los primeros meses después de la DANA ni yo promovía muchos actos institucionales ni estábamos en eso. Estábamos arremangados en el trabajo, como lo seguimos ahora.
P.- ¿Pero no tuvo la sensación de que la alcaldesa le huía?
R.- No, yo tenía la sensación de que tenía que trabajar.
P.- ¿Y el runrún en el partido y en los medios de que ella quería ser su sucesora?
R.- Si le hubiera hecho el más mínimo caso a ese supuesto runrún, con el compromiso más importante y ante el desafío más importante, no me lo hubiera perdonado.
P.- ¿Cómo le trata la gente por la calle? En las primeras semanas le insultaban, le abucheaban, básicamente alentados por la izquierda. Pero usted siempre ha dado la cara.
R.- Siempre he tratado de hacerlo. Y si alguien se me acerca a decirme algo, le atiendo. Otra cosa es que venga alguien a gritarme y no quiera escuchar lo que le digo. Hay dos casos: cuando convocamos el acto a través de agenda oficial y cuando no. En el primer caso, normalmente aparecen unos cuantos afiliados a hacer un escrache, promovido por políticos. Otra cosa es cuando me dicen que no he estado en la zona cero, y no he dejado de estarlo, sin dar parte a los medios ni recogerlo en la agenda pública.
P.- ¿Qué impresión se le quedó en Paiporta con los Reyes, que aguantaron bolazos ?
R.- Humildemente, alguno me tocó también a mí.
P.- ¿Qué sensación se le quedó al ver al presidente del Gobierno salir corriendo de allí de manera cobarde? Mientras usted y sobre todo los Reyes, que son las primeras autoridades del Estado, se quedaban.
R.- Yo no me planteé nada que no fuera estar al lado del Rey, pasase lo que pasase. Hubo un momento que no vimos al presidente del Gobierno ni a la Reina, que se había quedado hablando con otras personas. Recuerdo a Su Majestad el Rey preguntando por la Reina y rápidamente le dijeron que estaba localizada. Y el presidente Gobierno ya no estaba. Yo, la verdad, no me planteé si podía haber ocurrido algo o había sido una decisión por seguridad. Sólo estaba pendiente de dos cosas: estar al lado del Rey, porque había tomado la decisión valiente de ir a Paiporta, y también pedir a todo el mundo que se pusiera la mascarilla, porque había riesgo de epidemia. Habrá que preguntárselo a Pedro Sánchez.
P.- ¿Qué pensó cuando vio que salía corriendo?
R.- Es que no lo vi. De repente, me giré y vi que no estaba. Pero nada más. Yo , en todo momento, pensé que había cumplido con mi obligación, que era estar al lado del Rey.