Todas las empresas, independientemente de su tamaño o actividad, deberán empezar a registrar la jornada de sus empleados mediante programas digitales . El proyecto de real decreto que ha salido este jueves a consulta pública elimina la posibilidad de computar el horario a papel y boli , una de las fórmulas más habituales entre las pequeñas empresas.
El Ministerio de Trabajo pretende así mejorar la fiabilidad del registro y cercar los excesos de jornada. La nueva normativa obligará también a las compañías a computar cada una de las pausas que realicen sus asalariados a lo largo del día. Las novedades entrarán en vigor a lo largo de las próximas semanas, una vez finalice la consulta pública y el texto se eleve a Consejo de Ministros para su aprobación definitiva.
Por el momento,