Esa foto se resignifica como un símbolo de despedida tras su fallecimiento.
El 23 de septiembre marcó la última aparición pública de Miguel Ángel Russo, querido entrenador del fútbol argentino. Ese día visitó el predio de Boca Juniors en Ezeiza, donde saludó al plantel y protagonizó un abrazo sentido con Juan Román Riquelme . La imagen, que en su momento pasó desapercibida, hoy se resignifica como un símbolo de despedida tras el fallecimiento del DT.
La visita de Russo al predio fue breve pero cargada de significado. Conversó con los jugadores y compartió un momento con Riquelme, capturado por las redes oficiales del club. Días después, su estado de salud se agravó por complicaciones relacionadas con su tratamiento oncológico, generando muestras de afecto masivas en las redes bajo