CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Al menos 28 muertos, más de una docena de desaparecidos y miles de afectados dejaron las fuertes lluvias que han azotado en las últimas horas el centro y sur de México, donde han ocasionado crecidas de ríos, deslaves y daños en carreteras, viviendas y hospitales, anunciaron el viernes las autoridades.

Las imagenes en redes sociales de distintos puntos afectados mostraban calles convertidas en ríos que arrastraban vehículos, ríos desbordados o casas casi totalmente cubiertas de agua. Las intensas precipitaciones también provocaron cortes de electricidad que afectaron a más de 320.000 usuarios, daños en casi 1.000 kilómetros (620 millas) de carreteras de seis estados y el despliegue de 8.700 militares para auxiliar a la población, informó el gobierno federal.

La presidenta Claudia Sheinbaum sostuvo conversaciones vía internet el viernes por la tarde con los gobernadores de los estados de Veracruz, Puebla, Hidalgo, San Luis Potosí, Querétaro y Guerrero para evaluar las afectaciones por las lluvias.

“Trabajamos para apoyar a la población, abrir caminos y restablecer el servicio eléctrico”, señaló la mandataria en su cuenta en la red social X, e informó que integrantes de las secretarías de Defensa Nacional, Marina e Infraestructura, Protección Civil, la Comisión Federal de Electricidad y la Comisión Nacional del Agua están apoyando a las poblaciones afectadas.

Una de las regiones más golpeadas por las intensas precipitaciones es el estado central de Hidalgo, donde hasta el momento se han reportado 16 fallecidos, dijo Guillermo Olivares Reyna, secretario de Gobierno estatal.

En conferencia de prensa, Olivares Reyna indicó que 1.000 viviendas, 59 hospitales y clínicas, y 308 escuelas resultaron afectadas por el desbordamiento de ríos y deslaves. También se han reportado daños en cinco puentes, y 17 de los 84 municipios permanecen sin luz.

En Puebla, también en el centro del país, al menos nueve personas fallecieron, informó el gobierno en un comunicado difundido en la noche.

El gobernador Alejandro Armenta había informado previamente que había 13 desaparecidos. Armenta solicitó a las autoridades federales ayuda para rescatar a 15 personas, entre ellas niños, que estaban en los techos de sus viviendas, las cuales quedaron completamente hundidas por la crecida de los ríos en la región de la Sierra Norte de Puebla. Cerca de la medianoche ya habían llegado aeronaves que se alistaban para rescatar a esas personas y a pacientes de hospitales afectados en el estado.

El gobernador estimó que más de 80.000 personas resultaron afectadas en Puebla por las fuertes lluvias. Un ducto de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) explotó en la localidad de La Ceiba debido a un derrumbe, precisó Armenta.

En Veracruz —estado suroriental limítrofe con el Golfo de México— fallecieron dos personas, una de ellas un policía, dijo a la prensa la gobernadora Rocío Nahle. Al menos 38 municipios fueron afectados y 5.000 viviendas quedaron dañadas, según actualizó después el gobierno federal. Además, la Marina evacuó a casi 900 personas para trasladarlas a albergues.

Nahle agregó que una de las zonas más golpeadas por el desbordamiento de algunos ríos e inundaciones es la ciudad de Poza Rica, en la región norte del estado, donde se suspendió el suministro de electricidad como medida de seguridad.

En redes sociales se difundieron videos en los que se observa a varias viviendas y vías completamente inundadas, al igual que vehículos arrastrados por la crecida de ríos en Poza Rica.

Más temprano, las autoridades confirmaron que en el estado central de Querétaro murió un niño al quedar atrapado en un deslave.