CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El otorgamiento del Premio Nobel de la Paz a la opositora venezolana María Corina Machado dejó evidente la polarización en México, pues mientras figuras de derecha y de oposición saludaron el reconocimiento al combate de la mujer contra el régimen autoritario de Nicolás Maduro, las voces de izquierda y las del oficialismo denunciaron sus intenciones “golpistas” y sus vínculos con Donald Trump y Benjamin Netanyahu, respectivos presidentes de Estados Unidos e Israel, o con el partido de extrema derecha española Vox.
Después de darse a conocer la decisión del Comité Noruego del Nobel, los actores de la política mexicana se activaron en redes sociales para fijar su postura respecto a un tema sensible en América Latina y particularmente en el país, donde el sector más