La vida comienza a regresar a la calle Hileras, 4 , en el barrio de Ópera , tras el derrumbe mortal del pasado martes , en el que cuatro trabajadores perdieron la vida durante las obras de rehabilitación de un edificio. Este fin de semana, muchos vecinos han podido volver a sus casas , aunque la presencia constante de curiosos en la zona hace que la tranquilidad aún quede lejos.
“ La calle parece ahora una atracción turística ”, lamenta Carmen , vecina del número 6, el edificio contiguo al siniestrado, mientras observa cómo decenas de personas se acercan para fotografiar los restos y comprobar el estado del inmueble .
Regreso progresivo a los hogares
Los técnicos del Ayuntamiento y los bomberos de Madrid han autorizado la vuelta a casa de varios residentes tras con