La leyenda comenzó con José Arias Restrepo. Es un vendedor de maní de Buga a quien le gustan las monedas antiguas. Estaba buscando esas monedas con un detector de metales en un sector de la Ciudad Señora conocido como Alto Bonito, cuando percibió algo cerca de su cabeza. Pensó que era un ave. Cuando miró detenidamente, observó una esfera metálica que volaba, como si fuera un balón con motor. ‘La esfera de Buga’, la llaman desde entonces, marzo de 2025.
Un acompañante suyo hizo un video del extraño aparato, con un iPhone 11. El video dura ocho minutos. José Arias tomó la esfera entre sus manos y calculó que pesaba dos kilos. Con el paso de los días, dice que aumentó a diez kilos; extraño.
En su casa, se acostó en su cama y puso la esfera sobre su pecho desnudo. Le dieron vómitos y mareo