En una jornada considerada trascendental para la región, Hamás liberó a los últimos rehenes israelíes que permanecían en cautiverio en la Franja de Gaza. La entrega se realizó tras un acuerdo que incluyó la liberación de cientos de prisioneros palestinos por parte de Israel, en un gesto que busca abrir un nuevo camino hacia la distensión en el conflicto.
El intercambio se llevó a cabo en dos fases: primero en el norte de Gaza, donde fueron entregados varios rehenes, y luego en el sur, completando la liberación de todos los sobrevivientes. También se recuperaron los cuerpos de algunos cautivos fallecidos durante el conflicto, como parte del mismo pacto humanitario.
La noticia provocó fuertes reacciones en ambos lados. En Israel, las familias celebraron con emoción el regreso de sus seres