**¡Polémica en la final de La Voz Argentina!**

La final de La Voz Argentina, emitida el lunes por la noche, ha desatado una fuerte controversia. Nicolás Behringer, Milagros Gerez Amud, Alan Lez y Eugenia Rodríguez compitieron por el codiciado premio, pero la transmisión grabada ha generado críticas en redes sociales.

Nico Occhiato, conductor del programa, abordó la situación en su programa Nadie Dice Nada, explicando que la decisión de grabar la final se debió a problemas de agenda de los jurados. "Fue grabada. Una cag... que sea grabada, no depende ni de mí ni de la producción, depende de la necesidad del canal", afirmó Occhiato.

El conductor reveló que se grabaron cuatro finales diferentes, una para cada participante, lo que restó espontaneidad al evento. "Todos actuaron que ganaron", explicó, añadiendo que la votación se cerró en vivo, pero el resultado se preparó con antelación.

Occhiato también mencionó que la falta de emoción en la final se debió a la logística de la grabación. "No hubo papelitos, no hubo cosas porque no hacíamos a tiempo a grabar", comentó. La final, que debería haberse realizado un mes antes, se extendió para empalmarla con el estreno de MasterChef Celebrity.

A pesar de las críticas, el programa se despidió con la consagración de Nicolás Behringer como el ganador, quien se mostró emocionado al recibir el trofeo. El segundo lugar fue para Alan Lez, del Team Lali, seguido por Milagros Gerez Amud y Eugenia Rodríguez.

La controversia ha generado un debate sobre la necesidad de mantener la emoción en los finales de los reality shows, y muchos televidentes expresaron su descontento en redes sociales, señalando que una final grabada carece de la magia de una transmisión en vivo. Occhiato, sin embargo, defendió la calidad de la producción y el esfuerzo del equipo detrás del programa, asegurando que fue un éxito a pesar de las circunstancias.

La situación ha dejado a los seguidores del programa reflexionando sobre el futuro de La Voz Argentina y la importancia de la autenticidad en la televisión.