Autoridades de Estados Unidos han confirmado un endurecimiento drástico en las sanciones económicas contra quienes ingresen al país de manera irregular.

La medida, que involucra a agencias como la Patrulla Fronteriza (Border Patrol), busca establecer un fuerte elemento de disuasión en la frontera. La nueva política se centra en castigar con multas elevadas a los migrantes que incumplan las leyes de inmigración, imponiendo la cifra de 5 mil dólares como un umbral de la nueva seriedad de las penalizaciones.

El gobierno de Estados Unidos argumenta que estas multas son necesarias para que el incumplimiento de la ley ‘tenga consecuencias’ y presionar a los migrantes sin estatus legal a abandonar el país.

El anuncio de estas sanciones económicas, que se suman a la prohibición de reingreso por

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