Uno de los grupos disidentes de las extintas FARC avanza en los diálogos de paz con el Gobierno
El Gobierno de Colombia ha dado un paso en su alicaída política de paz total, la estrategia impulsada por el presidente Gustavo Petro para acabar con los grupos armados. La Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano , una de las disidencias de las FARC —que agrupa las estructuras llamadas Comandos de la Frontera y Coordinadora Guerrillera del Pacífico, con presencia en el suroccidente del país—, ha entregado este miércoles 14 toneladas de material de guerra que serán destruidas. El Ejército ya ha acabado con 3,8 toneladas de armamento, incluidas 190 granadas, cerca de 15.000 cartuchos y el suficiente ANFO (un explosivo industrial) para crear hasta 12.000 minas antipersona.
La cesión del equi