En Colombia, el sueño de un empleo formal y estable sigue tropezando con un obstáculo que parece no ceder, por cuenta de la informalidad empresarial, o por lo menos esta es una de las conclusiones del reciente comentario económico del Centro de Estudios de Anif, que advierte que, mientras nueve de cada diez micronegocios sigan operando al margen de la formalidad, será imposible mejorar de manera sostenida la calidad del trabajo.

El informe revela que la tasa de informalidad empresarial multidimensional, medida con base en la Encuesta de Micronegocios del Dane, se mantuvo en 90,2% en 2024, sin cambios frente al año anterior. En otras palabras, el país lleva cuatro años consecutivos con un promedio de 90% de micronegocios informales, lo que demuestra que los esfuerzos de formalización aún

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