Bolivia se prepara para una histórica segunda vuelta presidencial este domingo 19 de octubre, pero lejos de celebrarse como una fiesta democrática, el proceso electoral se vive con creciente desilusión. Los ciudadanos deberán elegir entre dos opciones que, para muchos, representan lo malo y lo peor: el senador centrista Rodrigo Paz y el expresidente conservador Jorge «Tuto» Quiroga, ambos envueltos en polémicas y acusaciones que han eclipsado cualquier debate serio sobre el futuro del país.

La contienda, que se definirá por primera vez mediante balotaje desde la reforma constitucional de 2009, se da tras el fin de un ciclo de 20 años de gobiernos de izquierda liderados por el Movimiento al Socialismo (MAS), que impulsó políticas de redistribución, nacionalización y fortalecimiento del Est

See Full Page