Albert Einstein pronunció en 1926 una frase que se volvió símbolo de su pensamiento: “ Dios no juega a los dados ”. Aunque suele asociarse con la fe, en realidad fue una crítica a la nueva física cuántica y a su interpretación del azar en la naturaleza.

Su crítica estaba dirigida a la mecánica cuántica , que emergía con fuerza y que para él introducía una aleatoriedad que parecía contradecir la armonía que observaba en la naturaleza.

¿Qué quiso decir Einstein con “Dios no juega a los dados”?

El joven Albert Einstein creció en una familia judía secular y, por un tiempo, practicó la religión con entusiasmo. De adolescente, el contacto con el pensamiento filosófico de Kant , Hume y Mach lo llevó a desarrollar un enfoque crítico hacia la autoridad y el dogma , tanto religi

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