En una final vibrante disputada en tierras chilenas, el conjunto africano se impuso con autoridad (2-0) a la poderosa Argentina gracias a un doblete de Yassir Zabiri, convirtiéndose por primera vez en campeón del mundo en la categoría Sub-20.
Con un futbol ordenado, valiente y lleno de identidad, los Leones del Atlas no solo conquistaron el título, sino también el respeto del planeta, consolidando el crecimiento que ha tenido su estructura formativa en los últimos años.
La gran noche del equipo marroquí comenzó desde los primeros minutos, lanzándose de inmediato al ataque y generando opciones de peligro sobre la meta de Santino Barbi, quien, con una dosis de fortuna, pudo responder a las ofensivas.
La presión sobre la meta argentina fue tanta que poco tiempo tardó en caer el primer