Fernando Alonso volvió a demostrar su capacidad para maximizar resultados incluso cuando el coche no acompaña. El piloto asturiano logró terminar décimo en el Gran Premio de Estados Unidos , sumando un punto importante para Aston Martin en un fin de semana en el que el monoplaza británico volvió a evidenciar sus limitaciones.
La carrera comenzó con dificultades para Alonso , que perdió dos posiciones en las primeras vueltas tras una salida complicada. Sin embargo, la suerte se alió brevemente con él: el incidente entre Carlos Sainz y Antonelli le permitió recuperar terreno y mantenerse en la zona de puntos. A partir de ahí, el bicampeón español se centró en defender su posición frente a Liam Lawson, quien le presionó durante buena parte de la carrera.
Durante 24 vueltas, Alonso