El desencanto se va apoderando del malaguismo. Con el oasis de la contundente victoria ante el Deportivo (3-0) en la semana anterior, son cinco derrotas en los últimos seis partidos. El partido que se fue en Leganés , donde asistieron varios centenares de malaguistas que se llevaron una decepción en Butarque , dolió, fue otro encuentro fuera de casa en el que el equipo adoleció de esa personalidad que el propio Pellicer deslizaba y el partido se escurrió entre las manos sin ser dañinos. También el acierto en las pocas ocasiones de las que se dispusieron.
El caso es que al final del partido hubo tensión entre afición y miembros del Málaga mientras se montaban en el autobús en la ciudad del sur de Madrid. En vídeos que grabaron malaguistas y que difundieron a través de las redes socia