Más de cuarenta años después, con tres hombres condenados injustamente por el asesinato de una adolescente en Long Island, un objeto olvidado en una cafetería ha permitido identificar a un nuevo sospechoso. Una muestra de ADN hallada en una pajita desechada condujo esta semana a la imputación de Richard Bilodeau, de 63 años, por el asesinato de Theresa Fusco, una joven de 16 años que desapareció y fue hallada muerta en 1984 en el condado neoyorquino de Nassau.
El caso de la joven conmocionó a la localidad de Lynbrook, donde trabajaba a tiempo parcial en una pista de patinaje. Su cuerpo apareció semanas después, cubierto por hojas en una zona boscosa cercana. La investigación inicial derivó en la condena de tres hombres, que pasaron varios años en prisión hasta que fueron exonerados en 200