
En 2024, la consultora estadounidense INRIX, especializada en análisis del tráfico, publicó el «Global Traffic Scorecard», un informe anual que evalúa los atascos en las principales ciudades del mundo . Según los datos, los conductores de Barcelona y Madrid pierden 41 y 40 horas al año atrapados en atascos, respectivamente. Estas cifras son significativas, pero comparadas con el atasco más largo de la historia , resultan casi insignificantes. Éste tuvo lugar en la autopista G110, una vía de aproximadamente 1.100 kilómetros que conecta Pekín con la región del Tíbet.
El 13 de agosto de 2010, el tráfico en la G110 superó en un 60 % su capacidad máxima, generando un embotellamiento que se extendió por más de 100 kilómetros y duró más de diez días . Durante este período, los vehículos avanzaban apenas un kilómetro por día, dejando a muchos conductores atrapados entre uno y cinco días dentro de sus coches. La situación era tan extrema que incluso las autoridades habilitaron salidas hacia carreteras secundarias , aunque estas medidas resultaron insuficientes para aliviar la congestión. Los habitantes de las localidades cercanas empezaron a vender alimentos y agua en puestos improvisados a precios que duplicaban e incluso triplicaban los habituales.
El atasco más largo de la historia
El atasco de la G110 fue el resultado de una combinación de factores. Uno de los más relevantes fue los numerosos peajes con los que cuenta la autopista, los cuales ralentizan el tráfico. Asimismo, durante el verano, muchos residentes de Pekín regresaban a la ciudad tras las vacaciones, aumentando significativamente la densidad de vehículos . A esto hay que sumar las obras y reparaciones en la vía, las cuales obligaron a cerrar algunos carriles. Otro de los factores que dio lugar al atasco más largo de la historia fue el incremento de la producción de carbón de Mongolia; buena parte del transporte hacia Pekín se realizaba por esta autopista, aumentando el tráfico pesado.
Para quienes quedaron atrapados en el atasco, la experiencia fue extrema. Además, se reportaron robos de combustible y otros incidentes menores , lo que complicó aún más la situación. La falta de acceso a servicios básicos obligó a los atrapados a depender de las provisiones que los vendedores improvisados ofrecían a precios disparados.
El atasco más largo de la historia ofrece varias lecciones para la planificación vial y el transporte en todo el mundo: es fundamental aumentar la capacidad de las carreteras según el crecimiento del parque automovilístico y el flujo de mercancías; el tráfico pesado debe gestionarse para no colapsar vías principales; es necesario establecer salidas alternativas y vías secundarias; finalmente, los sistemas de gestión del tráfico, son esenciales.
Situación en España
En España, los datos de 2024 reflejan que Barcelona, Valencia y Madrid lideran el ranking de las ciudades con más atascos. Para elaborar estos rankings, TomTom, la conocida empresa de navegación, analiza información de más de 500 ciudades en 62 paíse s y, a partir de la misma, calcula métricas como la velocidad media de los trayectos, el tiempo necesario para recorrer distancias concretas y, sobre todo, el porcentaje de congestión.
Barcelona encabeza la lista con 87 horas perdidas al año, lo que equivale a más de tres días completos atrapados al volante. Valencia ocupa la segunda posición con 62 horas perdidas, superando incluso a Madrid, donde los conductores pierden 64 horas al año. Ciudades como Vitoria, Gijón, Pamplona y Sevilla también registran cifras considerables, con entre 36 y 54 horas perdidas anualmente. En la parte baja de la tabla se encuentran Zaragoza, Vigo y Alicante, con 37 horas de media.
Éste es el ranking nacional que refleja las ciudades y el nivel de congestión en casa una de ellas:
- Barcelona – 26 %
- Valencia – 24 %
- Madrid – 21 %
- Vitoria – 22 %
- Gijón – 18 %
- Pamplona – 19 %
- Sevilla – 20 %
- Zaragoza – 21 %
- Vigo – 18 %
- Alicante – 18 %
En el contexto global, la congestión en España puede parecer moderada. La ciudad con más atascos del mundo es Barranquilla , en Colombia, donde los conductores pierden 136 horas al año y tardan 36 minutos en recorrer apenas 10 kilómetros. En Europa, Londres es la ciudad con más atascos, mientras que en términos de tiempo perdido, Dublín supera ampliamente a cualquier ciudad española, donde los residentes pasan hasta 155 horas anuales atrapados en atascos.
«Cuando se apoxime a la retención, adapte su velocidad: deje de acelerar y pise el freno aumentando progresivamente la intensidad sobre el pedal. Así también advertirá a los conductores detás de usted para que también reduzcan la velocidad. Además, consumirá menos combustible y evitará desgastes prematuros de las piezas del embrague. Dentro el atasco, use el embrague solo cuando sea necesario (antes de detenerse y para reanudar la marcha) y suelte el pedal con suavidad, evitando «tirones». No conviene mantener el embrague pisado y la marcha engranada: desgastará la mecánica innecesariamente.
Al reanudar la marcha, aunque la congestión parezca desvanecerse, ¡mucho cuidado! En esta situación, nunca acelere bruscamente para recuperar tiempo perdido: el atasco puede reaparecer más adelante. En su lugar, acelere un poco menos que el vehículo que va delante: esto le ayudará a mantener la separación y dosificar las frenadas», recomienda la Dirección General de Tráfico (DGT) .