Los santos se distinguen por llevar sobre sus cabezas una aureola, ese disco luminoso que les da el toque sagrado y que suele brindarles la autoridad de los altares.
Este elemento no es meramente decorativo, sino que les vincula con la divinidad, gracia, santidad y luz espiritual que emana de ellos y por lo que son venerados.
En el caso del doctor José Gregorio Hernández nos acostumbramos a verlo trajeado llevando sombrero. Además por las historias de milagros realizados siempre lo percibimos como un santo, a pesar de los 70 años de negativas para darle sitial en los altares.
Ahora, luego del reconocimiento papal que le dio el rango de santo de la iglesia católica, ya comienzan a mostrarse las aureolas que debe llevar San José Gregorio Hernández, desde antes conocido como el santo de lo