La lucha contra el desperdicio alimentario en los hogares tiene un enemigo tan conocido como frustrante: la fruta que madura demasiado rápido. El caso de los plátanos es, quizá, el más representativo de esta carrera contrarreloj, pasando de un amarillo vibrante a un estado casi inservible en lo que parecen ser apenas unas horas. Sin embargo, un método casero que ha ganado una enorme popularidad en las redes sociales promete una solución eficaz para un problema doméstico muy común , alargando la vida de esta fruta hasta dieciséis días.

El responsable de este rápido deterioro es un compuesto químico que la propia fruta genera de forma natural durante su ciclo vital. Se trata del gas etileno , una hormona vegetal que actúa como un potente agente de maduración no solo para el plátano, sin

See Full Page