El expresidente francés Nicolas Sarkozy comenzó el martes su condena de cinco años en una prisión de París, la primera vez en la historia moderna del país que un jefe de Estado es encarcelado.
Al salir de su domicilio esta mañana, Sarkozy saludó a amigos y simpatizantes que gritaban su nombre y cantaban el himno nacional francés. Después se dirigió a la prisión en coche, escoltado por un convoy policial.
“Es un día aciago para él, para Francia, para nuestras instituciones, porque este encarcelamiento es una vergüenza”, dijo a los reporteros que estaban frente a la prisión uno de sus abogados, Jean-Michel Darrois.
Sarkozy fue declarado culpable de conspirar para obtener financiación para su campaña presidencial de 2007 del gobierno del coronel Muamar el Gadafi, ex hombre fuerte de Lib