
El líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, no descartó la posibilidad de que EE.UU. suministre a Ucrania armas de largo alcance tras el anuncio de nuevas sanciones energéticas contra Rusia.
En declaraciones a la prensa en Bruselas, Zelenski dijo que esperaba la imposición de las sanciones, en particular contra dos importantes petroleras rusas, Lukoil y Rosneft , como medida adicional para presionar a Moscú hacia una resolución del conflicto ucraniano. Enfatizó que el alto el fuego es posible, pero que hay que incrementar la presión contra Rusia.
"Era increíble, pero ahora vemos las decisiones sobre estas sanciones energéticas, que son muy importantes. Y por eso creo que con [los misiles] de largo alcance tomaremos la misma decisión en algún momento en el futuro, pero depende de la parte estadounidense ", afirmó.
El 6 de octubre, Donald Trump no descartó la posibilidad de que Washington suministre misiles de crucero Tomahawk a Ucrania. El mandatario declaró que "en cierto modo" ya había tomado una decisión al respecto, pero admitió que antes de dar el paso definitivo le gustaría saber "qué hacen con ellos" y "adónde los envían" .
Posteriormente, el inquilino de la Casa Blanca señaló que enviar misiles Tomahawk a Kiev constituiría "un nuevo paso de agresión" , y así se lo explicó al líder del régimen de Kiev. "Bueno, no lo sé. Para ser sincero, quizá tenga que hablar con Rusia", agregó. "¿Quieren que los Tomahawks se dirijan hacia ellos? No lo creo. Creo que hablaré con Rusia sobre eso", reiteró.
Mientras que este miércoles Trump negó la información publicada por The Wall Street Journal de que su Administración había levantado una restricción clave sobre el uso de algunos misiles de largo alcance proporcionados por aliados occidentales a Ucrania. Asimismo, dijo que aprender a utilizar los misiles Tomahawk toma al menos medio año y Estados Unidos no va a enseñar a militares de otros países cómo usarlos.
Moscú, lista para un acuerdo
Desde el Kremlin han subrayado en varias ocasiones que la defensa de los derechos de la población rusoparlante en Ucrania es una de las prioridades de la operación militar especial. "Nosotros luchamos no tanto por los territorios, sino por los derechos humanos y por el derecho de las personas que viven en esos territorios a hablar en su propia lengua, a vivir dentro de la cultura y de las tradiciones que les han sido transmitidas por generaciones anteriores", afirmó el presidente Vladímir Putin.
El mandatario también ha reiterado que Moscú está lista para el diálogo y un acuerdo, pero insiste en la necesidad de abordar las causas profundas del conflicto , como la expansión de la OTAN y la discriminación de los rusoparlantes en Ucrania. "Para Rusia, los acontecimientos en Ucrania están relacionados con amenazas fundamentales para nuestra seguridad nacional", indicó durante la cumbre con Trump en Alaska, haciendo hincapié en que Moscú quiere alcanzar una paz duradera y sostenible y no un alto el fuego temporal .
La propuesta de Moscú contempla que Kiev retire completamente sus tropas de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk y de las provincias de Zaporozhie y Jersón ( incorporadas a Rusia después de consultas populares en 2022) y reconozca estos territorios, así como Crimea y Sebastopol , como sujetos de la Federación Rusa. Además, deben garantizarse la neutralidad y la no alineación, así como la desnuclearización, desmilitarización y desnazificación de Ucrania.