WASHINGTON — La Fuerza Aérea de Estados Unidos realizó un vuelo de bombarderos B-1 Lancer cerca de la costa de Venezuela, en una clara demostración de fuerza en medio de crecientes tensiones entre ambos países. Este vuelo se llevó a cabo el jueves, poco más de una semana después de que otro grupo de bombarderos estadounidenses realizara un ejercicio similar en la región.
Los B-1 Lancer, que pueden transportar hasta 34.000 kilos de armamento, incluyendo armas nucleares, fueron detectados en los paneles de seguimiento de vuelos al suroeste de Dallas-Fort Worth a las 4:30 a.m. En su punto más cercano, el bombardero estuvo a poco más de 80 kilómetros de la costa venezolana. Nueve horas después, se registró que el B-1 reapareció durante unos 15 minutos en la Región de Información de Vuelo (FIR) de Maiquetía, aunque no está claro si ingresó al espacio aéreo venezolano.
Este despliegue se produce en un contexto de creciente actividad militar estadounidense en el Caribe, donde se han acumulado buques de guerra y aviones de combate. La administración del presidente Donald Trump ha intensificado sus operaciones en la región, alegando que forman parte de una campaña antidrogas. Sin embargo, el gobierno venezolano teme que estas acciones sean una tapadera para un intento de cambio de gobierno.
Desde septiembre, Estados Unidos ha llevado a cabo ataques letales contra embarcaciones en aguas cercanas a Venezuela, acusando a estas de traficar drogas. Trump ha afirmado tener la "autoridad legal" para realizar ataques contra los supuestos narcotraficantes, sugiriendo que también se podrían llevar a cabo acciones militares en tierra.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha respondido a estas provocaciones afirmando que su país cuenta con 5.000 misiles antiaéreos Igla-S de fabricación rusa, ubicados en "posiciones clave de defensa aérea". Estos misiles son capaces de derribar objetivos aéreos pequeños, lo que añade un nivel de tensión a la situación.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, ha comparado la actual ofensiva contra el narcotráfico con la guerra contra el terrorismo que EE.UU. declaró tras los ataques del 11 de septiembre de 2001. "Nuestro mensaje a estas organizaciones terroristas extranjeras es que los trataremos como hemos tratado a Al Qaeda", declaró Hegseth.
La situación sigue siendo tensa, y el despliegue de fuerzas estadounidenses en la región continúa generando preocupación tanto en Caracas como en la comunidad internacional. La respuesta de Venezuela y la postura de Estados Unidos en los próximos días serán cruciales para el desarrollo de este conflicto en curso.

Noticias de América

LancasterOnline Estados Unidos
El Paso Ya
CNN en Español
Associated Press Spanish
Prensa Latina
AlterNet