Nació y se crió en el campo. Es la tercera generación de una familia de la que “lleva las raíces en la sangre” y le transmitió la pasión por la ganadería. Está agradecida por el trabajo de su abuelo y de su padre, uno de los pioneros de la introducción de inseminación artificial y de la raza Braford en Corrientes. Y está convencida de que “ con tecnología se puede hacer otro tipo de ganadería, con otro tipo de manejo ”.

Lo dice María Marta Batalla (48), quien, junto a su esposo, Marcelo Ermácora, lleva adelante Tres Luceros, un establecimiento de cría, de 1450 ha (350 de ellas alquiladas) que nació en 2017, luego de una sucesión familiar, y que actualmente muestra importantes progresos en índices productivos, muy superiores al promedio de esa provincia .

La historia transcurre en Bon

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