Por Walter Dzurovcin*

Cualquier abordaje extremo que quite grupo de alimentos muy bajos en calorías, que no respete los hábitos ni las posibilidades de la persona, no es bueno. Si la persona deja de comer alimentos y no los reemplaza por otros que le aporten los nutrientes que está dejando de consumir, la consecuencia será que le empiecen a faltar cosas en el organismo, se pierde fuerza y energía y surgen cambios en el estado de ánimo.

Eso es pan para hoy y hambre para mañana, porque los resultados que se obtienen son muy pequeños, y por lo general no se pueden sostener. La dieta a corto plazo se utiliza mucho como estrategia en actividades deportivas como el boxeo, pero en ese caso hay un fin específico. Además, tiene un tiempo de duración acotado: se hace por dos a cuatro semanas y n

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