La iglesia de San Hipólito es un hervidero de devotos, peregrinos, de familias que buscan tomar misa, bendecir a su santo, pedir por los suyos, como cada 28 de octubre, Día de San Judas Tadeo.
El santo de las causas difíciles convoca a todo tipo de personas afuera del templo ubicado sobre el Paseo de la Reforma y la avenida Hidalgo, y este martes no es la excepción.
Las historias de fe van desde la ayuda para que un familiar convaleciente en un hospital sane, hasta situaciones que van más allá de lo razonable: "me ayudó a salir de problemas económicos", "a pasar un momento complicado con mi pareja".
Afuera del templo, desfilan solitarios cargando una efigie de yeso, no importa el peso; algunos se atreven a cargar hasta 80 kilos, más algunas bolsas con pulseras para entregar a los fieles

La Jornada Capital

Nmas
Net Noticias
HOY MX
Zona Franca Política y Sociedad
CNN
Raw Story
TMZ