La ciudadanía de diversos municipios mexiquenses, así como de algunas alcaldías de la Ciudad de México, padecieron durante el inicio de esta semana por alguno de los múltiples bloqueos que trabajadores del agua, los llamados “piperos”, realizaron como respuesta al operativo Caudal ante la inoperatividad y colapso del gobierno.

El operativo fue una acción implementada por parte de la autoridad judicial de Estado de México, con el objetivo de desarticular las redes dedicadas al robo y comercialización ilegal de agua, conocido ahora como “huachicol de agua” dentro del territorio a través de despliegues policiales simultáneos en 48 municipios.

Y es que, de acuerdo con las investigaciones realizadas, mientras existe un costo regulado promedio que alcanza los 1,131 pesos por cada 10 mil litros

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