Miércoles 29 de Octubre de 2025, 05:43
EL CRIMEN DEL LINYERA. Carlos Marcovich, empleado del Siprosa, imaginó que podría incinerar a un indigente para simular su propia muerte, cobrar un seguro e iniciar una nueva vida con una de sus amantes.
Un giro clave en la investigación por el homicidio del contador José Antonio Romano refuerza la sospecha de que el profesional conocía a sus agresores. Así lo señaló el fiscal Miguel Varela, a partir de los indicios reunidos: los autores del crimen no solo lograron ingresar sin forzar accesos a la vivienda de Aguilares donde fue hallado el cuerpo, sino que también manipularon la camioneta del contador y hasta regularon el freezer a máxima potencia para ocultar el cadáver, maniobra que convirtió al caso en uno de los episodios más macabros registrado

Context Tucuman

Noticias Argentinas
El Liberal
Infobae
infobae de Buenos Aires Province
La Capital Policiales
Noticias de Argentina
La Nación Sociedad
Diario Popular
ELONCE
Diario Uno
ABC30 Fresno Sports