El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha anunciado una nueva regla que impactará a todos los inmigrantes sin un estatus legal permanente que necesiten renovar sus autorizaciones de empleo. Esta norma, que entra en vigor mañana, excluye a aquellos cuyo permiso de trabajo está vinculado a la duración de su estatus migratorio.

La medida busca regularizar el proceso de renovación de permisos de trabajo, pero genera preocupación entre los inmigrantes que se encuentran en una situación vulnerable. Según el DHS, la nueva regla tiene como objetivo simplificar el proceso y asegurar que los permisos de trabajo se mantengan actualizados.

Sin embargo, muchos inmigrantes temen que esta normativa pueda complicar aún más su situación laboral. La exclusión de ciertos permisos de trabajo podría dejar a un número significativo de personas sin la posibilidad de trabajar legalmente.

La implementación de esta regla se produce en un contexto de creciente debate sobre la inmigración en Estados Unidos. Las organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes han expresado su preocupación por el impacto que esta medida tendrá en las comunidades afectadas.

A medida que se acerca la fecha de entrada en vigor, los inmigrantes y sus defensores están instando a una revisión de la norma para evitar consecuencias negativas en el acceso al empleo y la estabilidad económica de miles de familias.