El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, ha calificado de “inaceptables” los ataques militares de Estados Unidos contra embarcaciones en el Caribe y el Pacífico oriental, que supuestamente transportan drogas ilegales desde Sudamérica. En una conferencia de prensa, la portavoz de Türk, Ravina Shamdasani, exigió que se investiguen estos ataques, señalando que “el creciente costo humano es inaceptable”.

Shamdasani subrayó que los ataques aéreos de Estados Unidos violan el derecho humanitario internacional. Türk ha instado a Estados Unidos a detener estas acciones y a tomar medidas para prevenir la ejecución extrajudicial de las personas a bordo de los barcos.

Desde el inicio de esta campaña militar a principios de septiembre, se han registrado al menos 14 ataques, resultando en la muerte de al menos 62 personas. El último ataque, que tuvo lugar recientemente, dejó cuatro muertos.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha defendido estos ataques como una medida necesaria para combatir el tráfico de drogas hacia su país. Sin embargo, esta estrategia ha generado divisiones entre las naciones de la región.

Shamdasani enfatizó que la lucha contra el narcotráfico debe ser un asunto de cumplimiento de la ley, que se rige por “límites prudentes” en el uso de la fuerza letal. La fuerza letal solo debe utilizarse como último recurso ante una “amenaza inminente para la vida”.

Los ataques han sido criticados por ocurrir “fuera del contexto” de un conflicto armado, lo que plantea serias preocupaciones sobre el respeto a los derechos humanos y la legalidad de estas acciones.

La ONU ha instado a Estados Unidos a reconsiderar su enfoque y a garantizar que se respeten los derechos de las personas involucradas en estas operaciones.

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