Doral, antes un refugio para miles de inmigrantes venezolanos en Florida, enfrenta una ola de mudanzas por temor a redadas y la caída del mercado inmobiliario. En esta ciudad donde casi la mitad de los habitantes son venezolanos, el impacto de las políticas migratorias se siente en cada esquina. Ana María Mejía muestra cómo el miedo y la incertidumbre están cambiando el rostro de una comunidad que alguna vez floreció.

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