María José López | EUROPAPRESS

04 nov 2025 . Actualizado a las 08:45 h.

Hay casos de acoso en que los protocolos no fallan, pero sí quienes los deben activar. Los tutores escolares, aquellos que día tras día observan el comportamiento de los estudiantes en clase, deben ser capaces de ver el miedo del alumno a ser molestado, increpado o vejado. Los profesores no pueden dejar de actuar por temor a que su intervención genere un estigma en el centro educativo: el estigma de ser un colegio con conflictos, de estar en el punto de mira social. Su inacción también los señala. Los muestra como profesionales poco preparados para enfrentar los problemas reales del alumnado. Como incapaces de enseñar a sus estudiantes algo tan esencial como distinguir entre una broma y el acoso. Se escudan en la

See Full Page