El tramo Valladolid–Pisté se ha convertido en zona de riesgo ante la ausencia de vigilancia y el aumento de asaltos a automovilistas y motociclistas.

Redacción/Sol Yucatán

Escuchar sobre robos en carretera solía ser algo propio del centro y norte del país, pero esa realidad ya alcanzó al estado de Yucatán, que hasta hace poco presumía ser una de las entidades más seguras del país.

Hoy, los asaltos comienzan a replicarse en el oriente del estado, principalmente en el tramo Valladolid–Pisté, donde los delincuentes aprovechan la falta de presencia policiaca para atacar a automovilistas y motociclistas.

Una investigación realizada por Sol Yucatán reveló que sobre el kilómetro 180 de la carretera federal libre Valladolid–Pisté, específicamente en el entronque hacia el municipio de Chankom,

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