Por Nina Portacio.

La mujer ha sido convocada a liderar en diferentes escenarios en el Siglo XXI. Por lo tanto, en este milenio rebosante de tecnología atacarla digital, verbal o físicamente ya no es una opción sino un delito. Y como tal, debe ser considerado todo agresor.

En condición de mujer nacida en Pupiales, Nariño, y más específicamente, de la Frontera Sur – Occidente de Colombia; me uno con esta Columna para repudiar el maltrato en todas sus formas y apoyar a otra mujer de la región que ha sido atacada por participar en política, desde su liderazgo en la gestión social.

La sociedad ha cambiado mucho y en muchos aspectos, pero no ha evolucionado tanto en el trato, valoración y respeto hacia la mujer. En eso nos falta recorrer mucho trayecto…

Las mujeres de Colombia y en especial

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