El mandatario ha mostrado gran entusiasmo por el torneo que se celebrará en conjunto con México y Canadá, pero especialmente por la posibilidad de que la selección estadounidense haga historia y se corone campeona por primera vez.

Aunque el equipo de las “Barras y las Estrellas” no pasa por su mejor momento, y su técnico Mauricio Pochettino enfrenta críticas por los malos resultados, Trump mantiene la esperanza de que el trofeo se quede en casa.

Incluso, el entrenador argentino comentó con humor que, si logran ganar el Mundial, le permitirá a Trump levantar el trofeo, gesto que simbolizaría el triunfo de todo el país.

“En caso de ganar el Mundial, le daré el trofeo y él podrá levantarlo”, dijo Pochettino.

Trump ya ha tenido el trofeo en sus manos en el pasado, cuando recibió al preside

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