Desde septiembre, Estados Unidos ha desplegado un fuerte operativo militar en el sur del Caribe, con el argumento de combatir el tráfico de drogas. Sin embargo, estos ataques contra las que se han denominado popularmente como “ narcolanchas "—al menos nueve bombardeos en menos de tres meses— han dejado 37 muertos y pocas pruebas del supuesto trasiego de narcóticos.

La estrategia, encabezada por el gobierno de Donald Trump, ha sido criticada por su opacidad y presuntas ejecuciones sumarias. Hasta ahora, solo tres víctimas han sido plenamente identificadas, y organizaciones internacionales de derechos humanos han exigido transparencia sobre los operativos y sus verdaderos objetivos.

ES DE INTERÉS: ONU exige a Estados Unidos detener ataques ilegales contra narcolanchas en el Car

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