Tres décadas después del asesinato de Luis Donaldo Colosio, el nombre de Jorge Antonio Sánchez Ortega volvió a colocarse en el centro del debate público cuando, el 8 de noviembre, agentes ministeriales lo detuvieron en el barrio de Los Reyes, en Tijuana. Este lugar se encuentra a unos 13 kilómetros del sitio donde ocurrió el magnicidio en 1994. La Fiscalía General de la República (FGR) investiga nuevamente su posible participación como presunto segundo tirador.

La FGR retomó el caso en 2024, luego de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos solicitara abrir nuevas líneas de investigación. En ese momento, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que los avances apuntaban a una presunta intervención de Genaro García Luna, quien habría tenido un papel clave para “res

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