Tu móvil no se rompió solo, fue diseñado para hacerlo. Es la obsolescencia programada, una estrategia que acorta la vida de los productos para obligarte a comprar de nuevo. Hoy, la mayoría de aparatos duran mucho menos: los móviles apenas tres años.

Esta práctica genera toneladas de residuos electrónicos: más de 17 kg por persona al año en Europa, y solo uno de cada cinco se recicla correctamente.

La solución pasa por el derecho a reparar: fabricar productos duraderos, con piezas disponibles y garantía ampliada. En España ya hay tres años de garantía y obligación de mantener repuestos durante diez.

El verdadero progreso no está en comprar más, sino en hacer que las cosas duren.

See Full Page