Un fenómeno sin precedentes sorprendió la noche del 11 de noviembre, cuando una tormenta solar de nivel G4 provocó auroras boreales visibles en García, Nuevo León , y Bácum, Sonora . Tonos rojizos, verdosos y púrpuras pintaron el cielo mexicano, resultado del choque entre partículas solares y la atmósfera terrestre.
El evento, normalmente reservado a las regiones polares, se observó en latitudes tan bajas debido a la intensa eyección de masa coronal del Sol. Miembros de la Sociedad Astronómica de Nuevo León registraron el fenómeno desde la carretera a Icamole, mientras que en Sonora, el fotógrafo Uziel Lira captó una imagen en La Atanasia.
El espectáculo se repitió también en Estados Unidos y Canadá , pero su aparición en México sorprendió a la comunidad científica. Este ev

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