I ntegrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se concentraron este miércoles en el Zócalo de la Ciudad de México para iniciar un paro de 48 horas y manifestarse frente a Palacio Nacional. Aunque los docentes aseguran que su protesta responde a demandas laborales y sociales, diversas voces en el ámbito político y ciudadano consideran que la movilización podría tener un trasfondo estratégico: restar espacio y visibilidad a la marcha nacional convocada para el próximo 15 de noviembre contra la inseguridad y las políticas del gobierno federal encabezado por Claudia Sheinbaum.

Desde temprana hora, contingentes magisteriales provenientes de Oaxaca, Chiapas, Guerrero y Michoacán instalaron casas de campaña en la plancha del Zócalo, bajo el asta bandera, y colocaron mantas con exigencias como la derogación de la ley del ISSSTE de 2007 , la abrogación de la reforma educativa y un mayor presupuesto para los sectores de educación y salud .

Fuentes cercanas al movimiento magisterial señalaron que, en principio, el plantón sería temporal y que no planean permanecer de forma indefinida. Sin embargo, la coincidencia de fechas con la marcha ciudadana del 15 de noviembre , organizada por decenas de colectivos y asociaciones civiles, ha generado especulaciones sobre una posible maniobra política para reducir el espacio disponible y la atención mediática del evento opositor.

En respuesta, dirigentes de la CNTE han rechazado tener vínculos con el gobierno federal o con el de la Ciudad de México. Argumentan que su movilización es autónoma y responde a causas propias del magisterio disidente.

El gobierno capitalino reforzó el cerco de seguridad en torno a Palacio Nacional ante la proximidad de ambas manifestaciones. Mientras tanto, autoridades de tránsito alertaron sobre posibles afectaciones viales en el Centro Histórico, donde la CNTE prevé mantener su concentración hasta el jueves. (Agencias)