La ilusión de comenzar una nueva vida duró muy poco para Michael Arley Hernández Morales , el joven de 23 años que fue asesinado en la noche del jueves 13 de noviembre en plena vía pública del barrio Café Madrid , al norte de Bucaramanga. Una puñalada en el cuello acabó con su vida mientras era atendido en el Hospital Local del Norte.

Michael había salido apenas una semana antes de un centro de rehabilitación, donde permaneció internado con el propósito de dejar atrás el consumo de sustancias y reconstruir su proyecto de vida. Su hermana, Angie Monsalve , contó a Vanguardia que él estaba motivado y sereno, convencido de que podía cambiar su historia.

Ese jueves pasó la mañana en su casa, en el barrio Betania, compartiendo con su madre. Al mediodía salió y le aseguró que regre

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