Newell's tocó fondo. Caminó por la cornisa del descenso como nunca antes en la historia contemporánea. Porque tanto con el Profe Castelli, Ricardo Caruso Lombardi o el Tata Martino jamás llegó a la penúltima fecha con riesgo real de descender. Esta vez sí, el precipicio estuvo ahí nomás. Hizo equilibrio en el abismo. Y zafó con el último suspiro que le quedaba. Aquí aparece un nombre fuerte que dio la cara y cumplió un rol trascendental: Lucas Bernardi.

Porque el capitán del equipo campeón en 2013 asumió el compromiso cuando la ganancia era mínima y la chance de hundimiento era máxima. Un hombre de la casa, que puso al club por delante de todo, que no evaluó las variables costo-beneficio y entregó su compromiso, conocimientos y corazón a tope. Así logró un objetivo trascendental para el

See Full Page