La actividad humana deja a su paso una huella y, al mismo tiempo, muchos residuos . Hay algunos conocidos y otros no tanto, que se abren paso en el uso y consumo cada vez más acelerados. Son contaminantes emergentes, sustancias de productos potencialmente peligrosas, que no cuentan con una legislación que las regule .

Para evitar que las personas los consuman o afecten el ambiente de un determinado lugar cuando son descartados, un grupo de investigadores de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) lleva adelante un proyecto para el desarrollo de plataformas que puedan ser utilizadas en sensores para la detección de dos de estos contaminantes en particular: el etinilestradiol y el triclosan , presentes en fármacos y productos de limpieza.

La iniciativa consiste en obtener sensor

See Full Page